Con un poco de prisa y con mucho apetito, un buen amigo y yo nos detuvimos a almorzar en la Parrillada Argentina, en su sucursal de la Colonia Escalón, ubicada en las cercanías del Redondel Masferrer.
El restaurante es pequeño y en la entrada te recibe un mesero de edad media, que te da la bienvenida y te acomoda en tu mesa, deja los menús que tiene en la mano y te toma la orden de las bebidas, las que deja en la mesa un minuto después, alejándose para permitirte revisar el menú con tranquilidad.
Éramos los únicos comensales en el restaurante, lo que seguro debía preocuparnos, pero teniendo el tiempo limitado, procedimos a ordenar y conociendo que los restaurantes de parrilla acostumbran servirte un consomé de res y una ensalada, pasamos directamente a pedir nuestro plato fuerte: un par de Puntas Jalapeñas.
Nos llevaron dos tazas consomé un poco ralo -que francamente necesitan mejorar-, un par de ensaladas frescas que acompañamos de aceite y aderezo mil islas, y que degustamos ya con la mente puesta en el plato fuerte (¡mi buen amigo y yo somos eminentemente carnívoros!).
Nuestros platos consistieron en un par de hermosas puntas de lomo de aguja, acompañadas de vegetales y puré de papas, con un bol mediano de salsa jalapeña. Los filetes estaban robustos y jugosos perfectamente asados, lo que en los países del cono sur llamarían “a punto”, sin duda para hacer agua la boca; la salsa jalapeña merecía detenerse un momento para volver a saborearla con la mente, pues no era la tradicional salsa mal cocinada y blanquecina, era un elixir divino de tono aperlado, adonde se podía encontrar prolijamente jalapeño y cebolla. Después de eso, quien podría el puré y los vegetales.
Ese día: cuatro tenedores rojos para la Parrillada Argentina. Espero no haber simplemente corrido con suerte y volver a encontrar la misma calidad en mi próxima visita.
Muy provocativo el ejemplo… es de buen comensal darse una vuelta por esa parrillada….
Tuve la oportunidad de ir a la nueva sucursal que han abierto en el Centro Comercial Santa Rosa en Santa Tecla y coincido en el comentario del buen sabor de la comida y las carnes en su punto. Lastimosamente para mí y mí familia que me acompañaba ese día la atención dejo mucho que desear (no por la falta de atención del único y muy amable mesero, el cual ese día te recibía, acomodaba, te llevaba el menú y la orden y creo que por un momento hasta cobro) por la mala administración que sin contar con personal suficiente para atender un día domingo (particularmente lleno en el centro comercial) decidió abrir y no dar abasto para todos los comensales presentes. Ese día recibimos dos consomes y dos ensaladas hasta que ya íbamos a la mitad del plato principal, faltaban cubiertos, servilletas, había que repetir una nueva orden hasta 3 veces (o ir por ella) y todavía estamos esperando el chirimol que acompañaba a las parrilladas al igual que los cafés que ordenamos al final. Una experiencia desastrosa y que jamas volveré a repetir visitando el restaurante. Es una lastima lo que una mala administración puede hacer a un lugar muy bueno en cuanto al sabor y presentación de la comida y al local que esta muy bonito en su nueva sucursal. Lo felicito por su blog, tomare sus recomendaciones para visitar nuevos lugares. Bendiciones.