Como ya relatamos en reseñas anteriores, nuestros lectores nos recomendaron dos lugares de pizza en Santa Ana. Hace unos tres meses publicamos la primera reseña de nuestra experiencia en Simmer Down, aquí les dejamos la reseña de Inna Jammin.
Inna Jammin se encuentra ubicado en la entrada de Santa Ana, a mano derecha. Un par de cuadras antes de llegar a Metrocentro. El lugar está ubicado en una casa de esquina bastante amplia, llegamos pasada la 1:00pm, estaba un poco lleno por lo cual tuvimos que esperar un momento. Después de unos minutos nos dieron nuestra mesa, hojeamos el menú y empezamos el normal debate sobre que pedir.
Después de preguntarle al mesero por sus recomendaciones, decidimos ordenar 5 pizzas personales: una Pork & Korn, una Criolla, una Yopo, una FourMaggio y una Di Macinata y, para conocer un poco más del menú y atendiendo la específica sugerencia de nuestro mesero, ordenamos una hamburguesa Casanova.
Sorprendentemente, casi todas las pizzas llegaron al mismo tiempo y rápido. Comenzamos por la FourMaggio, la cual es una combinación de queso criollo, parmesano, mozzarella y queso crema. Esta pizza tiene un sabor explosivo en el paladar; la mezcla de quesos elegida por Inna Jammin es deliciosa. Me gustó una bola de queso crema que ponen a derretir, le da a algunos bocados una textura diferente, en pocas palabra y según muchos en la mesa, esta pizza es de otro mundo.
La siguiente que probamos fue la Pork & Korn: formada por tocino, jamón, cebolla morada y elotes rostizados. Nada de miserias en esta pizza, parecía que le habían puesto el doble de todo. El tocino crocante y caliente, la cebolla morada distribuida a la perfección y el elote le daba el toque perfecto. Me gustó el sabor disparejo de esta pizza, diferente a cada bocado, seguíamos alegres en Inna Jammin, totalmente impresionados de la calidad de las pizzas.
La Yopo llevaba pechuga de pollo, mozzarella, salsa de ajo y cilantro. Cualquiera pensaría que una pizza de pollo no puede ser tan perfecta, sin embargo esta se acercó mucho y dio de que hablar en la mesa. La salsa de ajo era de otro nivel. El pollo se sentía exquisito.
La Di Macinata pasaba al frente, esta era una combinación de carne de res, cebolla morada, queso cheddar y perejil. Todo excelente con esta pizza, todo en su punto. Perfecta para los carnívoros de la familia. Las fajitas de res estaban jugosas y suaves. Empezábamos a preguntarnos si todo era perfecto en Inna Jammin.
La última pizza en pasar la prueba fue la Criolla. Esta pizza venía acompañada con una fuentecita chirmol y combinaba frijoles fritos, carne, chorizo, loroco, jalapeño y salsa de aguacate. La combinación en un principio nos llamó la atención, muchos en la mesa la probaron sin el chirmol y no les gustó, al agregarle el tomate mejoraba bastante, pero no lo suficiente para llegar al nivel de sus antecesoras, el chorizo algo reseco y la salsa de aguacate necesitaba mejorar. en general con esta quedaron a deber.
Por último llegó la Hamburguesa Casanova. Venía servida en una tabla de madera con un aspecto imponente. De todo lo recibido esta burger fue lo que menos gustó a todos, la carne estaba suelta y con un sabor fuerte a especias que no fue del agrado de nadie, comparada con las pizzas, aquí quedaron a deber y mucho.
Inna Jammin nos sirvió una variedad interesante de pizzas, todas crocante y de buen aspecto, el servicio es rápido y amable, el lugar está un poco descuidado, la Burger necesita mejorar y mucho, pero sus pizzas son algo delicioso que vale la pena probar. Red Fork otorga 5 Tenedores Rojos a Inna Jammin en esta visita.
Para los lectores que preguntan los precios:
las pizzas cuestan $ 3.00 cada una en su presentación personal.
las ultimas 2 de carne cuestan $ 5.00