En el 241 de Washington Street, en Boston, se puede encontrar el primer restaurante cuya cocina está robotizada; un grupo de 4 egresados de ingeniería y robótica del MIT fundaron Spyce, en donde los platillos son preparados con una máquina, a la vista de todos los clientes.
Los dueños, acudieron a Daniel Boulud un reconocido y premiado chef francés con varias estrellas Michelín, para que diseñara cada uno de sus platillos, por lo que Spyce ofrece alta gastronomía, rápida y robotizada. El objeto dice el chef, es tener a disposición del público un “nuevo concepto de comida rápida, nacida de la alta cocina”.
Los platillos son bols (bowls) y el menú se refleja en pantallas táctiles, que sirven para que cada cliente haga su orden personalmente; todos los bols cuestan $7.50 y los tienen ordenados por clasificaciones vegetarianas, veganas o libres de gluten por ejemplo y, cada ítem del menú consigna las calorías de cada bol.
Los fundadores lo definen como “el primer restaurante del mundo que ofrece una cocina robótica capaz de preparar comidas complejas” y, aunque reconocen otras iniciativas similares, aseguran que su lema los hace únicos: “excelencia culinaria impulsada por la tecnología”.
La máquina, al frente de todos, prepara en sartenes giratorias los bols ordenados por los clientes y los sirve en los platos que el personal dispone al frente de cada sartén; la experiencia, según dice los clientes, es muy buena, los precios son razonables y el proceso dura consistentemente 3 minutos, sin duda vale la pena programar pronto una visita.