Nuestros lectores constantemente nos están recomendando nuevos lugares para visitar, por lo que, después de recibir varias alertas prometedoras sobre un nuevo lugar de hamburguesas, decidimos poner atención a Comida Gorda en Antiguo Cuscatlan. El lugar funciona en un localito de un pequeño centro comercial llamado Plaza Tonatiuh, el local por dentro se ve un poco improvisado y las mesas para comer están afuera, por lo que las comparten con los demás establecimientos.
Francamente el lugar necesita sus mejoras, pero estaba relativamente lleno y eso, normalmente es buena señal; decidimos ordenar y nos dijeron que no tenían bebidas (que?) por lo que teníamos que ordenarlas en otro establecimiento. En ese punto las señales eran confusas y ya nos estábamos arrepintiendo, pero estando en el puesto y queriendo cumplirle a nuestros lectores, seguimos adelante. Elegimos las 3 burgers de su menú, un sándwich de res gaucho y un plato de carne.
La hamburguesa Camarón Vaquero: Cocina Gorda sirve esta burger abierta, la preparan con la mezcla de carne de la casa, vegetales y camaroncitos al ajillo, sobre esto el cocinero (quien sale de la cocina a servir la burger) vierte el contenido de una pequeña sartén en la que viene un mix de quesos derretidos, con lo que se baña toda la hamburguesa, los sabores de la carne de res, el chorizo y los camarones combinan perfecto, pero el show se lo lleva el mix de queso: una delicia.
Pasé a la hamburguesa Santísima Trinidad, que según el menú, promete unir tres mundos. Es una burger que se monta con una base de pan, papas fritas, carne 50/50 (chorizo y res molidos) y como tapadera, una pequeña pizza personal de jamón, estaba más que emocionado de probar este espécimen; al morderlo, confieso que me quedé a medio camino, estaba rica, pero un poco corta de sabor, el pan, la base de la pizza y las papas le restaban fuerza, es como mucha masa y almidón, estaba bien, hasta allí.
Llegó la Burguesita: una hamburguesa elaborada con una pattie 50/50 carne de res y chorizo con tocino, queso mozzarella y salsa jalapeña, ésta fue la gran sorpresa de la noche, la torta de la burger estaba perfecta, rosada y jugosa, el queso caliente y derretido y la salsa jalapeña de picante suave y mucho sabor a chile, cremosa y perfecta; simplemente una maravilla por la que vale la pena volver o ir a donde sea.
Con los ánimos por los cielos, pasé al sándwich de lomo gaucho: es un baguette de buen tamaño relleno con trozos de lomito de res con chimichurri y una generosa ración de esa salsa jalapeña deliciosa, que ellos hacen; el pan estaba tostadito por afuera, como a mí me gusta y la carne estaba suave y jugosa, la combinación de chimichurri y salsa jalapeña una maravilla, estábamos más que encantados.
Por último pasé a la Picata Gorda: ellos sirven lomo de res a parrilla en trozos, chorizos encamisetados, papitas salteadas con ajo, pan y una fuente de chimichurri. La carne estaba a punto y el chimichurri sabroso, los chorizos encamisetados estaban rellenos de mozzarella y enrollados en jamón; estaban un poquito pasados de punto pero con buen sabor, éste era nuestro último plato y la cocina seguía quedando bien con el equipo.
Empezamos un poco prejuiciados con el lugar, ya que tienen varios puntos por mejorar y por eso casi decidimos irnos, esto hubiera sido un grave, gravísimo error; la comida de estos cipotes estaba bien rica y sin duda, valió la pena cada plato que recibimos. Red Fork otorga 5 Tenedores Rojos en esta visita a Comida Gorda y vamos a regresar pronto por esa Burguesita de muerte lenta.
Para los lectores que preguntan por los precios y la ubicación:
Picata Gorda $8.00
Burguesita $7.00
Burger Camarón Vaquero $8.00
Burger Santísima Trinidad $9.00
Sándwich Lomo Gaucho $7.00
