A la hora de comer soy totalmente ecléctico, en lo que a gustos se refiere, de allí que seamos aficionados a comidas de todo el mundo y para comida india Pakora Hut siempre fue nuestro lugar favorito, pero hace un tiempo cerró sus puertas –entiendo que temporalmente- y nos quedamos algo así como huérfanos de comida india. Esta semana, viendo en Netflix un programa dedicado al pollo en mantequilla, decidí no esperar más e ir a conocer Swagat.

Así que sin más, nos dejamos ir a almorzar a este nuevo restaurante, que abrió sus puertas hace unos meses en plaza Soho, en el CC Las Cascadas. Queda justo a la par de Lizarran, un bar de tapas españolas, cuya reseña aún les debemos. Volviendo a nuestro elegido, el sitio está de buen ver y el interior muy bien decorado con motivos indios; entusiasma de entrada, como detalle menor, las mesas y sillas de la terraza externa ya que son bajas, me imagino que como forma de ambientación, pero no es muy cómodo.

La palabra Swagat significa bienvenido en hindi y esa, precisamente, fue la sensación que nos dio el personal al llegar; no recuerdo el nombre de quien nos atendió pero él no tomó nota de nada: un Murgh Makhani, un Murgh Tikka Masala, un Delicias de la India, un Zafrani Gosht Biryani, 3 órdenes de Naan, uno simple, otro con queso y otro con ajo y 5 bebidas diferentes; anticipamos que algo podía confundirse a la hora de recibir la comida.

Bebida y alimentos llegaron prácticamente juntos y nuestro mesero nos apantalló, llevando la orden precisa a nuestra mesa; bebida, comida y pan, todo llegó de acuerdo a lo pedido, el aroma de nuestros platos era delicioso, toda la comida servida en fuentes de metal (creo que son de cobre) que sirven comúnmente en los lugares indios. El mesero nos comentó que los cocineros son originarios de Delhi, lo cual subió de inmediato las expectativas de todos en la mesa.

Inicié con las Delicias de la India: una cazuela de pollo, pescado, cordero y camarón frito, con trozos de chile verde y bañado en una salsa rojiza. La textura y la cocción de las proteínas del plato era perfecta, los trozos de cordero y camarón estaban especialmente sabrosos, la salsa tiene ese sabor especiado y picante, distintivo de la comida india; perfecto es la palabra justa para este plato.

Pasé al Murgh Makhani –makhani: es mantequilla en hindi-; éste, que podría ser el platillo más emblemático de la cocina india, pollo en salsa de tomate con mantequilla, son trozos de pollo rebosados en una salsa de tomate con crema y mantequilla, la textura de la salsa era cremosa, las especies específicas son difíciles de percibir, porque como en toda receta de la India, tiene muchas especias y cada casa, cada familia y cada cocinero tiene su propia mezcla para cada platillo; en cualquier caso estaba delicioso, un 10, íbamos más que bien.

Pasé al Zafrani Gosht Biryani: cuya autoría se disputa la India y Pakistán, la palabra viene del persa birian que significa algo como frito antes de cocinar, su tradición está registrada más o menos en el siglo XV, época del Imperio Mogol. Dejando de lado la historia y concentrándonos en el platillo, elaborado con arroz basmati, cordero y especies, diré que el plato con una presentación más que modesta, tenía algunos defectos, el arroz estaba un poco pasado de cocción y el cordero tenía muchos huesos, hubiese preferido un plato más prolijo y delicado; del sabor si no me puedo quejar porque estaba muy bueno.

Pasé al Murgh Tikka Masala: consiste en pollo en trozos marinado previamente en yogurt y rebosado en salsa de tomate y crema condimentada con Garam Masala (la mezcla de especias de la India más reconocida); nuevamente la cocina mandó un 10 indiscutible a la mesa, la textura deliciosa y el sabor impecable del plato, lo hace mil veces repetible.

Además de los principales, pedimos 3 órdenes de naan, uno sin nada, otro con ajo y otro con queso, no quiero terminar sin reconocer que el pan estaba muy bien hecho, llegó calientito a la mesa; me concentré en el que tenía ajo, me sedujo el aroma y el color brillante de la mantequilla derretida, el sabor era suave y estaba un poquito tostado, pero muy bueno.

En general la comida de Swagat es de muy buena para arriba, aunque podrían mejorar un poco la presentación, los aromas y sabores parecen auténticos; sin duda, importan muchas de sus especias y el chef indio hace un gran trabajo desde la cocina. Agradecimos al mesero su servicio y lo felicitamos por la comida, nos levantamos planeando regresar.
Red Fork otorga 5 tenedores rojos a Swagat y su cocina de la India.

Si preguntas por los precios y la ubicación:
Murgh Makhani $ 7.95
Murgh Tikka Masala $ 7.55
Delicias de la India $ 17.95
Zafrani Gosht Biryani $ 9.75
Naan simple $ 1.50
Naan con ajo $ 2.25