A partir de nuestra reseña de desayunos en Donkey’s, nos escribió Johanna H., dejándonos el comentario: “para desayunos tienen que ir a Roots lo mejor que he comido”, así nos entusiasmó y decidimos poner rumbo a la Avenida Reforma en la Zona Rosa hacia este restaurante que queda unos 20 metros abajo de Cadejo.

Llegamos a las 8:15 de la mañana y el sitio aún estaba solo. Nos dieron una mesa en la terraza y nos dispusimos a esperar al resto de comensales pues esta vez llegamos separados. En ese lapso pareció que el servicio se olvidó de nosotros. Nos hubiera gustado que nos ofrecieran algo de tomar o que por lo menos nos llevaran un café, hasta pensamos “quizás faltan meseros”, así decidimos esperar al resto del grupo que estaba por llegar.

Pasado otro momento, llegó el mesero a tomar la orden, nos explicó bien todos los platos y algo importante: preguntó el término de cocción a los que ordenamos platos con huevos, esta es una buena señal para las expectativas del desempeño de la cocina, un minuto después regresó con el café y la sensación de la mesa fue que todo aceleró, ya que la orden de los alimentos llegó casi de inmediato.

Empecé por la Shakshuka Roja, un plato grande con una tomatada especiada con un toque de picante que ahogaba dos huevos tiernos y terminaban con terrones de queso feta y perejil; la shakshuka es un platillo del medio oriente (como huevos rancheros pero más salsudos), el plato de Roots es bien grande y llega lleno de tomatada con tonos de comino, tomillo y chile, sabroso y apenas picante, las yemas tiernitas y rebanadas de pan de masa madre para chuponiar, un 10 de arranque.

Las Tostadas Nórdicas, dos tostadas de masa madre con queso crema de cabra, salmón, huevos fritos y aguacate bañados con parmesano rallado, acompañados por salsa holandesa y papas fritas, las tostadas dos especímenes robustos llegaron crujientes a la mesa, la mezcla de pan ácido, huevos, queso y salmón era una cremosa delicia, los platos de Roots estaban de muerte lenta y las porciones eran bastante generosas, sin duda más de lo esperado.

Los huevos Benedictinos, pan de muffin de masa madre coronados con dos huevos tiernos con salmón, bañados en salsa holandesa y acompañados con papas fritas. No se quedaron atrás, el pan era suave, liviano y los huevos aunque no estaban pochados en agua, llegaron en su punto, tiernitos y la yema líquida se mezclaba con la salsa holandesa, tan bueno que te lo querías devorar.

Los huevos rotos eran dos huevos fritos tiernos con papas, ahogados en tomatada con chorizos hechos en casa y rematados con rebanadas de jamón serrano; este plato, que a simple vista tiene un aire similar a la shakshuka, fue una verdadera sorpresa. La tomatada sabía completamente diferente a la primera, por el color seguro aportado por pimentón español ahumado, la yema líquida se mezclaba con el tomate y era interrumpida por deliciosos tropezones de chorizo de cerdo hecho en casa y rebanaditas de jamón serrano; sin duda mi favorito de la mañana, un plato que quiero repetir, pero ya.

Por último dejé lo dulce, un plato de 3 tostadas robustas de pan brioche con rebanas de manzana verde caramelizadas con una especie de compota de frutos rojos y almendras, este último puso la cereza a la experiencia, el pan era suave, húmedo y tanto manzana como compota estaban suaves y con un dulzor moderado, un 10 redondo a la experiencia.

El servicio, desde que nuestro mesero tomó la orden, fue verdaderamente amable y expedito, tornando el desayuno en una experiencia difícil de mejorar, el café llegaba calientito y rápido (los desayunos incluyen refill) y pensamos que de pronto llegamos cuando recién abrían y el mesero estaba poniendo todo en orden para el servicio (platos, tazas, cubiertos, café, etc.) y por eso se tardó en llegar a la mesa, porque una vez arrancó era un jet, su conocimiento del menú era total y su trato absolutamente amable. Nos hizo querer regresar y PRONTO.
La comida de Roots es generosa, se nota que usan productos de primera, el pan según entendí, todo es hecho en casa, los chorizos que también los hacen en casa son una delicia, sus sabores están bien logrados y el servicio es remarcable, sus precios a primera vista puede que no parezcan económicos, pero sus platos son tan buenos y abundantes que sentís que les quedas debiendo. Red Fork otorga 7 Tenedores Rojos a Roots en esta visita.

Shakshuka Roa 9.5, Tostadas Nórdicas 10, Huevos Benedictinos 10, Huevos Rotos y 7.5 las Tostadas de Manzana Caramelizada y Almedras.