
Con las nominaciones de la IV Gala de la Gastronomía, nos quedó como tarea la reseña de Querida, un restaurante casual que funciona en la misma propiedad de Lobby, en el Bulevar del Hipódromo justamente frente a Delikat.

Llegamos por la noche como a las ocho, la entrada está a un lado, no recuerdo ni siquiera que tuviera rótulo, pero después de dejar el carro en el ballet Parking ($2.00) nos dirigieron de inmediato allí. El lugar es pequeño un Lobby con un barcito y una terraza con unas ocho mesas, elegimos una y checamos que la anfitriona del lugar es el menú; así elegimos unas entradas y algunos de los platos de fondo, pues por la hora llegamos algo afiladitos.

Empecé por los Crostini de Ajo y Queso de Cabra, una bandejita con una canasta 🧺 de pan 🍞 y tres ramenkin, uno con ajo 🧄 otro con queso 🧀 de cabra 🐐 y un tercero con miel de arándanos, los dientes de ajos estaban rostizados, al punto en que cada diente es dulce, cremoso y ha perdido el picante, el queso crema untuoso y algunas líneas de miel de arándanos en las tostadas perfeccionaban la experiencia, un 10 indiscutible en ejecución para este plato sencillo, pero cuyos elementos estaban perfectos.

Después pasé a los mejillones, Querida sirve una fuente honda con bastantes bivalvos abiertos como ofreciendo el tesoro que guardaron, sirven los mejillones sudados en aceite de oliva, ajo, vino blanco y chile seco 🌶 cocinados levemente para no perder el sabor dulce clásico de los mejillones.

Luego, pasé a las Gambas al Ajillo, 4 camarones 🦐 cholos marinados en mostaza y salteados a fuego generoso en aceite de ajo 🧄 y cilantro, el punto estaba perfecto, los camarones crujientes y llenos de sabor, tanto que quieres chuponear con pancito 🥐 los jugos que van quedándose en la fuente.

El Risotto con Hongos 🍄 fue lo siguiente en pasar por las armas, el plato de Querida tenía un gran aspecto, arroz arbóreo (italiano como debe ser) caldo de vegetales asados y un mix de hongos porcini, champiñones y portobellos rematado con hilos de puerro fritos y queso parmesano 🧀, un bocado lleno de sabor umami y ese suave dulzor característico de los champiñones, simplemente delicioso.

Seguidamente pasamos a los postres, mi única opción fue el sorbete de aceite de oliva 🫒, un postre que jamás había probado y que me llamaba desde el menú, Querida sirve tres bolas de sorbete con crocante de pistacho, el sorbete cremoso, como de seda derritiéndose en la boca, con un dulce suave y con indiscutible vocación de postre, pero con un claro sabor al aceite y romero, aparentemente contradictorio pero absolutamente delicioso, a mejorar el crocante de pistacho que restaba con su calidad a la experiencia.

Querida nos ofreció como cortesía unas tartas fritas de manzana 🍏 devanadas en azúcar y canela acompañadas con helado, este fue otro gran postre, sencillo a morir pero ejecutado de gran forma por la cocina, dulce, caliente, frío y un poco picante, delicioso.

La pasamos de lo mejor en Querida y todos los que me propusieron venir se anotaron un exitazo conmigo, el servicio es de muy bueno a excelente, la comida es excepcional, los precios no son bajos pero están acordes a la calidad de la comida y los ingredientes que usan, definitivamente más que invitado a volver. 7 Tenedores Rojos a Querida en esta visita.
