Esta vez decidimos subir al boquerón, pusimos la vista en lo más alto y nos dirigimos hasta Un Rincón Del Cielo; ya hace un par de años que escribimos una reseña del lugar así que solo tomamos camino, para los que necesiten coordenadas, según un amigo es más o menos así:

En la carretera al Boquerón vas a encontrar varios rótulos de los restaurantes, busca los de Un Rincón del Cielo, es el mismo desvío de Linda Vista, es como en el kilómetro 18, al llegar al desvío al lado izquierdo, vas a ver un montón de rótulos de un lugar que se llama Volcatenango, no te metas allí, es a un ladito, eso sí a la derecha, la calle es una cuesta pronunciada de cemento, no te vayas a asustar que es algo empinada, pero subís sin problema, pasas a la par de la entrada de Linda Vista, A Lo Peruano y algún otro y seguís como medio kilómetro más, no te desesperes que el lugar aparecerá a la derecha.

Es una casa de campo preciosa con ladrillo visto, decorado con detalles de madera, muebles antiguos como decoración y una terraza inmensa, que también tiene algunas mesas y desde donde se tiene una vista amplia de la ciudad, que esta mañana estaba tomada por la neblina y apenas se podían ver algunos esbozos de San Salvador. Sin duda estábamos por encima de las nubes. El clima, aun con los calores de la época, aquí es otro y el fresco del volcán estaba más que perfecto.

El sitio estaba solo, pero nuestro mesero nos atendió de inmediato y después de revisar el menú elegimos algunos desayunos y un par de pupusas por separado; ojo el desayuno incluye café pero sin refill, así que los cafeteros tienen que estar dispuestos a pagar un poco más.

Empecé por las pupusas: dos pupusas cholas de queso con loroco y de queso con chicharrón, la masa delgada y las pupusas pesadas de tanto relleno que sorprende, el queso que hacía muchos hilos (más parecido a un mozzarella que a un quesillo) y con bastante loroco, francamente muy buenas.

Después, pasé a las pupusas montadas, un plato con dos pupusas, un par de huevos estrellados y plátanos fritos, los plátanos estaban muy sazones faltos de punto y dulzor, pero los huevos llegaron tiernitos; aquí debo decir que me hubiera gustado que los frieran por separados, para poner uno sobre cada pupusa, pero siendo así acomodé mis dos pupusas como torre y puse los huevos encima, sí, así como se los imaginan, la yema escurría como salsita en las pupusas, delicioso.

Después pasé al típico, con los elementos bien ordenaditos en el plato, pero que se miraba bastante escaso: frijoles fritos, huevos, tomatada, plátanos fritos y algo más que, al momento de ordenar, cambiamos por doble plátano, los frijolitos estaban colochitos en su punto y la tomatada con los huevos delis, algo escaso talvez el desayuno pero se dejaba comer.

El último fue el desayuno de Omelette: frijoles fritos, tomatada, crema, plátanos y omelette de jamón y queso; el huevo estaba un poquito pasado pero sabroso, la tomatada ayudaba para darle untuosidad al bocado y los plátanos los dejamos de lado.

El lugar es verdaderamente mágico, la vista es preciosa, el clima fabuloso y todo está bien decorado, el servicio es bueno y verdaderamente la pasas más que bien, los precios pueden estar un poco elevados, pero siempre vale la pena estimar que si un restaurante abre en un sitio remoto, aumenta los costos de operación. Red Fork otorga 5 huevos rojos a Un Rincón del Cielo.

para quien pregunta los precios, olvidamos fotografías el recibo, pero las 3 opciones de desayuno costaban entre 9 y 10 dólares y las pupusas $2.75
He probado dos platos del menú de almuerzo y cena y debo de decir que fue súper decepcionante en comparación con los precios elevados.
La carne de res y de pollo a la «parrilla» estaba súper llena de aceite, sin sabor y un pedazo súper pequeño de cada uno fue los que nos sirvieron, apesar de ser una parrillada para dos personas.
Los vegetales que le acompañaban a la carne igual estaban escurriendo en aceite y el arroz sin sabor.
La verdad no lo recomiendo y no le daría una segunda oportunidad.
Lo único rescatable de ese lugar es la vista y las instalaciones.